lunes, 6 de mayo de 2013

Amor constante más allá de la muerte

Amor constante más allá de la muerte

Cerrar podrá mis ojos la postrera
sombra, que me llevare el blanco día;
i podrá desatar esta alma mía
hora, a su afán ansioso lisongera:

      mas no de essotra parte en la rivera
dejará la memoria, en donde ardía;
nadar sabe mi llama la agua fría,
i perder el respeto a lei severa.

      Alma, a quien todo un dios prissión ha sido,
venas, que humor a tanto fuego han dado,
medulas, que han gloriosamente ardido;

      su cuerpo dejarán, no su cuidado;
serán ceniza, mas tendrá sentido;
polvo serán, mas polvo enamorado.

Francisco de Quevedo
 
 
Te dejo, además un vídeo:
 



1.- ¿Qué te ha parecido la interpretación el poema?
2.- ¿Serías capaz de hacer una versión tú? ¿Un rap, quizás?
3.- ¿De otro poema de Quevedo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario